Vivencias del 15/12/09: El hombre carpa

martes, 15 de diciembre de 2009

Hoy ha sido un día completo.

A primera hora (en clase, me refiero, somos unas tiernas estudiantas), con la loca de lengua, La Celestina moderna. Me vuelve loca con su voz de pito, habla como si se hubiese tragado una bocina. No sé bien qué dijo... Solamente que nos volvió locos con las etapas de... Alguna época.

A segunda, me enteré de mi nota de franchute. Nada interesante.

A tercera se nos ocurrió el nombre para el blog, mientras nos partíamos de risa y la de Historia del Arte nos miraba con cara de odio contenido. Pobre mujer...

En el recreo ocurrió lo bueno. Vamos, lo bueno sucedió cuando estaba durmiendo.

Le conté a mi querida Faraona que había soñado con... Cristiano Ronaldo. Oh, sí. Pero no el típico sueño: soñé que era un hombre carpa.

Como lo leéis.

En mi sueño yo era amiga del señor futbolista. Y tenía que llevarlo a un estanque de desove, porque era la época. Total, el tío empieza a lloriquear.

-¡No quiero meterme en el estanque!

-Que te metas, pesao, que tienes que cumplir con tu deber como hombre carpa (sí, era algo asumido y conocido por todos, lo más normal del mundo).

-¡No quierooo!

Se pone a patalear (...) y se tira en el suelo convertido en carpa, con movimientos espasmódicos a lo Magikarp. Lo cojo (es verde con motas rojas, y pesaba más que un muerto ahogao) y lo tiro al estanque.

Se pone a nadar y al cabo de un rato vuelve a convertirse en humano.

-¡Dame dos cigarrillos! -me pide.
Y no, no fumaba. Simplemente usaba cigarrillos en sus fotos a lo cani. Sí, un acto extraño, pero así era. Se metió dos en la boca (enteros, literalmente) y se puso a hacer el monguer posando. Le exhorto que vuelva a su tarea (el fornicar carpil), y al cabo de un rato vueeelve a salir el tío pelma, y me dice:

-¡Cuanto tarda la Verónica esta en poner los huevos!

-¿A mí qué me interesa?
Nada. Pero el chaval... Pelmaaaazo.

Total, poco más de sueño. Es una chaladura, típica de las mías. Ya se conocerán más.

También durante el recreo, veo cómo entra una minusválida en el cuarto de baño hecho para ellos, y me dice La Faraona:

-Joder, la meten ahí como si fuese...

Se para, y le digo:

-¿Como si fuese, qué? Es el cuarto de baño.
Me mira con cara de "WTF?" y me responde:

-Ah... Iba a decir como si fuese el manicomio o algo así.

No tiene sentido, lo sé, pero esas son nuestras conversaciones verídicas.

A cuarta hora tuvimos esa maravillosa asignatura que es griego, y logramos descifrar la traducción de Edipo y la Esfinge. Nuestras traducciones son tan locas como las conversaciones.

A quinta hora era la recuperación de latín (obviamente, mi excelsa persona no había de hacerla), y vimos el examen La Faraona y yo y era MUY fácil.

-Profesora... Si lo hacemos, ¿sube nota?

-Claro.

-¿Pero si suspendemos...?

-No baja.

Me mira mi amiga.

-Dame uno (con tono de: ¡pásame el canuto!, qué poco respeto).

Así que yo también cogí uno. Y me encontré con un examen de latín así porque sí. Me gusta hacer exámenes sorpresa...

Por suerte llegué tarde a historia. Me gusta la asignatura, pero el profesoooor... Buf.

La tarde fue filosófica. Platón VS Sofistas, una lucha encarnizada por la victoria en el campo de la verdad.

Y no hay gran cosa que contar. La Faraona se fue al sobre, así que nada dirá ya.

Pondré dos conceptos y/o consejos hoy:

-Las mujeres de Granada eran acusadas de musulmanas porque bajaban a lavarse al río con cierta frecuencia.

Ya sabes... "Sé guarra y vivirás".

-Surferando: acto de surferar. Movimientos espasmódicos de dudosa efectividad que ejecuta La Faraona cuando ríe con la denominada risitis (concepto a aclarar en otra entrada).

Con el tiempo mejorará el asunto, y habrá más tonterías. Muchas más. Y no tan tonterías.

Simplemente, es la felicidad de una mente perturbada (o de unas mentes perturbadas)

Buenas noches y que tengáis buenas vivencias.