Sueño de hoy: los ángeles de Silent Hill

lunes, 18 de enero de 2010

Es que tengo yo unos sueños...
Bueno, el caso. Estábamos La Faraona y yo viendo un vídeo en YouTube sobre gastronomía, de una mujer así con el pelo corto y rubio que se parecía a Chelo García Cortés. Le damos a más información en el vídeo, y aparece que ha sido grabado en Silent Hill con una cámara diurna.
Al cabo de un rato, aparece un fantasma al lado de la mujer. Dice, tan tranquila, que es uno de los típicos fantasmas del pueblo. El fantasma se está unos segundos quieto, pero de pronto empieza a llamarnos a La Faraona y a mí y nos mete en el mundo del vídeo.
Bueno, un poco diferente. Era como una especie de ermita, oscura, sucia y con polvo revoloteando a través de los haces de luz que entraban por los vanos del muro. El fantasma, de una mujer, no asustaba demasiado, pero ambas dos estábamos paralizadas. Nos habla, y nos dice que hagamos X (donde X es un pasaje del sueño que no recuerdo), y nos devuelve a la realidad. Nos miramos...
Y vemos que tenemos alas. Sí, alas, de ángel. No tardamos en comprobar que se pueden usar y nos tiramos balcón abajo, sobrevolando las calles de la ciudad. Viajamos hacia una especie de tienda  de ultramarinos donde compramos viandas para la noche, y tenemos que volver a mi casa por los utensilios que usaremos para preparar los alimentos. Pero, atención... de algún modo, hemos hecho los espaguetis mientras caminábamos (¿¿Quién quiere alas pudiendo caminar?? xDD) y nos los hemos comido, mas de todas formas vamos a mi casa a recoger las cosas para hacer de cenar. I'm so amazed.
Cuando salimos de mi casa con los bártulos, nos ven unos antiguos compañeros del colegio. Lejos de alegrarse por nuestra visión, se dedican a perseguirnos para intentar matarnos o algo así o_ó, y salimos volando ella y yo.
Llegamos de noche a una especie de colina, muy verde, sobre la que brillan tres lunas: una amarilla, otra azul y otra roja. Ahí dormimos, y por la mañana volvemos a alzar el vuelo hasta llegar a una zona de arenisca, muy rojiza. Unas máquinas están inundando el lugar, haciendo que salgan a flote unos cadáveres, algunos envueltos en vendas, otros sin envolver, que parecen haber muerto por una extraña peste. Y en ese momento le digo a La Faraona que tenemos que evitar que se propague esa enfermedad.
Y poco más recuerdo. Es otro de mis súper sueños :D, fetén xDD.

2 Comments:

Anónimo said...

Poco mas que decir aparte de que el titulo del blog es todo un acierto :S.

Sere said...

cuando me lo contaste me quedé sin comentarios, y ahora sigo igual xDDDD